Dentro del Proyecto PLASMAR se realizó la monitorización durante un año de los microplásticos presentes en tres playas de las Islas Canarias: Playa Lambra en La Graciosa, Famara en Lanzarote y Las Canteras en Gran Canaria.
Los resultados, que han sido publicados recientemente en la revista Marine Pollution Bulletin, demuestran que las playas con orientación norte y noreste de las islas están expuestas a un alto nivel de contaminación.
Playa Lambra, una de las playas menos frecuentadas por turistas, fue la que presentó un mayor nivel de contaminación lo que indica que la contaminación no es de origen local, sino que los microplásticos son arrastrados por la Corriente de Canarias y depositados en las playas.
Entre los tipos de contaminantes encontrados destaca la presencia de alquitrán que en algunas zonas representa el 35% de las muestras, y los pellets de resina que representan en Famara el 44%.
Estos pellets son la materia prima con la que se fabrican los objetos plásticos, la presencia de estos pellets demuestra el origen exógeno de la contaminación ya que en las islas no existen industrias para la fabricación o transformación de plásticos.
Los principales factores que afectan la acumulación de microplásticos en las playas son el oleaje y el viento a escala local.
